Mandar a tu novio a comprar “cosas de chicas” puede resultar demasiado osado en algunas ocasiones; a pesar de sus mejores intenciones, es probable que una vez se encuentre en la tienda las pase canutas para diferencias correctamente cada uno de los productos…

Atención a esta historia completamente real, porque muchas parejas se van a sentir identificadas. Terriblemente identificadas:
“Te prometo que es la última vez que te lo pido“:

Es como si la chica le hablara en otro idioma:

Así que tuvo que explicarle todo paso a paso:

La diferencia entre labial y esmalte de uñas:

La comunicación entre esta pareja es de lo más graciosa:

Pero nunca te imaginas hasta dónde son capaces de llegar:

Y de pronto él se convierte en “el artista“:

En el fondo ella disfruta de esto más que él:

Es obvio que él no sabe lo que está haciendo:

Pero aguantó cada punto como campeón:

Hasta que terminó la lista de encargos:

Una verdadera comedia llena de errores:
Fuente.
Vía Elegí mal día.