La trágica muerte de Álvaro.
La tragedia ha sacudido al país. El cuerpo sin vida de Álvaro Prieto, el joven promesa del Córdoba Juvenil que llevaba desaparecido desde el pasado 12 de octubre, ha sido encontrado este lunes por la mañana entre dos vagones de tren en la estación de Santa Justa, en Sevilla. La Policía Nacional ha confirmado la identidad del cadáver, que se encontraba en avanzado estado de descomposición, y ha abierto una investigación para esclarecer las circunstancias de su muerte.

Según el primer informe de la pre-autopsia, realizado por el forense en el lugar de los hechos, el cuerpo del futbolista presentaba signos compatibles con una descarga eléctrica, teniendo en cuenta la localización de las quemaduras en ambas manos y la presencia de cables de alta tensión en el acople de los vagones. El médico ha indicado que las manos del joven mostraban “quemaduras y ausencia de vello piloso, indicativo de posible electrocución”. Asimismo, ha estimado que el fallecimiento se produjo hace unos cuatro días, coincidiendo con la fecha de su desaparición.
Un trabajador de Renfe relata cómo fue su encontronazo con Álvaro Prieto.
La hipótesis que maneja la policía es que Álvaro Prieto intentó colarse en un tren para regresar a Córdoba, tras pasar la noche del 11 al 12 de octubre en Sevilla con unos amigos. Al parecer, el joven perdió el tren anterior y no tenía dinero en efectivo ni batería en el teléfono móvil para comprar otro billete. Así lo ha revelado un trabajador de Renfe, que fue testigo del momento en el que Álvaro fue interceptado por los agentes de seguridad de la estación.

En una entrevista exclusiva concedida al programa ‘Y ahora Sonsoles’, el empleado ha relatado que él y su compañero intentaron ayudar al joven y le ofrecieron incluso un cargador de móvil, pero él lo rechazó. “El chico pasó delante de mí con los de seguridad. Se le ofreció… Le preguntaron que por qué se había saltado y eso y decía que él perdió el tren anterior y que no tenía dinero en efectivo y que el teléfono lo tenía sin batería. Le ofrecieron un cargador y él dijo que no”, ha explicado.
Según su testimonio, Álvaro se dirigió al párking, pegado a las vías, y luego se coló en las instalaciones del cátering de los trenes. Allí intentó acceder a los túneles subterráneos, donde fue interceptado nuevamente por otros compañeros. “Vale, vale yo es que estoy buscando un tren. Pues salga por fuera, que eso es por fuera. Y ya, no se sabe nada más”, ha contado el trabajador, que ha asegurado que Renfe actuó según los protocolos de seguridad y que Álvaro “quiso subirse al tren a toda costa”.

El trabajador ha lamentado la desgracia ocurrida al joven futbolista, del que ha dicho que no sabía nada sobre su vida personal ni sobre lo que le había sucedido la noche anterior. “El chico, pues nada… Le habrá pasado una desgracia, pero que no sabemos qué le había sucedido la noche anterior, con las movidas que vendría… No sabemos nada de eso. Pero que lo que compete a Renfe es eso”, ha concluido.
Álvaro Prieto era una de las promesas del Córdoba Juvenil, donde jugaba como centrocampista. Su desaparición había generado una gran conmoción entre sus familiares, amigos y compañeros de equipo, que habían difundido su foto por las redes sociales pidiendo ayuda para encontrarlo. El club cordobés ha expresado su profundo dolor por la pérdida del jugador y ha enviado sus condolencias a sus seres queridos.